PULPO

Nombre científico: Octopus vulgaris. Características: Molusco cefalópodo de cuerpo robusto y musculoso, con la cabeza bien diferenciada. Cuerpo pequeño en relación a ésta. Octópodo, los ocho brazos salen de la cabeza, situados alrededor de la boca, localizada en el centro en posición ventral. Coloración variable ya que es mimético puede variar entre el amarillento, el pardo, el verdoso, etc. Longitud máxima de 300 cm con los brazos alargados, habitualmente entre 100 y 150 cm. Hábitat y modo de vida: Sedentario, habita sobre fondos rocosos o de piedras, con abundancia de cuevas o grietas desde donde ataca y se refugia. Desde la costa hasta los 100 m de profundidad. Fuerte voraz y huidizo. Solitario, territorial y eminentemente nocturno, solo rompe el aislamiento en época de reproducción, que se produce entre finales de invierno y entrada la primavera. Distribución: Extensa, se encuentra en el Atlántico norte, mar del Norte, Atlántico sur, Pacífico, Indopacífico y Mediterráneo. Pesca: Las técnicas más empleadas son nasa, raña, cotelo y palangre de fondo.

LA INTELIGENCIA: El pulpo es considerado por los especialistas el invertebrado de mayor inteligencia. Puede no parecer mucho si nos imaginamos a un invertebrado. Valga mejor otro dato: los etólogos (científicos que estudian el comportamiento animal) comparan y equiparan la inteligencia del pulpo a la del perro. Esta se debe fundamentalmente a su complejo sistema nervioso, dividido de forma eficaz entre el cerebro y los tentáculos, al excelente diseño de sus ojos, y a la enorme capacidad manipuladora de sus tentáculos. Sus ojos compiten con los nuestros en excelencia, y su lóbulo óptico (que interpreta la información visual) y su excelente sentido del tacto le posibilitan realizar tareas muy complejas. Esta gran combinación entre cerebro, ojos y tentáculos les permite aprender de la experiencia a la hora de solucionar problemas (característica fundamental de la inteligencia). La contrastada capacidad de aprendizaje a partir de la observación, todavía tiene más mérito cuando se tiene en cuenta que la hembra del pulpo muere nada más nacer sus huevos. Esto no significa otra cosa que los pequeños juveniles no tienen una referencia, un patrón de comportamiento que imitar en base al cual desarrollar estrategias de caza y supervivencia. Y no hay que olvidar que los pulpos, como el resto de los cefalópodos, son depredadores, lo que implica el estudio, análisis y memorización de los patrones de comportamiento de sus presas. No se pierdan los videos que proponemos, hablan por si solos.

Recetas

http://www.eladerezo.com/recetario/receta-pulpo-a-feira.html 
http://blogs.elpais.com/el-comidista/2010/07/cinco-platos-urgentes-para-hacer-con-pulpo-paul.html
 

Bibliografía

http://www.mercadosmunicipales.es/uploads/pescados/Pulpo.pdf   

http://zco1999.wordpress.com/2010/07/10/la-inteligencia-de-los-pulpos/